viernes, 24 de septiembre de 2010

¿Community Manager o Consultor de Redes Sociales?


El boom de las redes sociales ha sido tan sorprendente que ha cambiado totalmente la concepción del Departamento de Comunicaciones Corporativas de una empresa o agencia de Publicidad.


En menos de un año, surgieron en Venezuela los cargos de Consultor de Redes Sociales, a fin de prestarle un servicio de seguimiento y manejo de redes sociales a una corporación.


Sencilla actividad que, después de su evolución y análisis, está tomando cada día más fuerza hasta adquirir el nombre de Community Manager, es decir, el encargado de gestionar y desplegar las estrategias necesarias para que una organización construya, administra y genere valor a través de la comunicación en las redes sociales.


Esta labor es tan interesante para las comunicaciones actuales de una organización que, según los expertos, puede desplazar al Director de Comunicaciones.


Esta hipótesis surge ya que el Community Manager es un profesional que se adapta fácilmemte a las necesidades y herramientas comunicacionales actuales.


De acuerdo con el experto en comunicaciones Germán Caicedo, entre sus habilidades se encuentran:


Escuchar: Monitorizar constantemente la red en busca de conversaciones sobre nuestra empresa, nuestros competidores o nuestro mercado.


Circular esta información internamente: A raíz de esta escucha, debe ser capaz de extraer lo relevante de la misma, crear un discurso entendible y hacérselo llegar a las personas correspondientes dentro de la organización.


Explicar la posición de la empresa a la comunidad: El CM es la voz de la empresa hacia la comunidad, una voz positiva y abierta que transforma la “jerga interna” de la compañía en un lenguaje inteligible. Responde y conversa activamente en todos los medios sociales en los que la empresa tenga presencia activa (perfil) o en los que se produzcan menciones relevantes. Escribe artículos en el blog de la empresa en otros medios sociales, usando todas las posibilidades multimedia a su alcance. Y selecciona y comparte además contenidos de interés para la comunidad.


Buscar líderes, tanto interna como externamente: La relación entre la comunidad y la empresa está sustentada en la labor de sus líderes y personas de alto potencial. El CM debe ser capaz de identificar y “reclutar” a estos líderes, no sólo entre la comunidad sino, y sobre todo, dentro de la propia empresa.


Encontrar vías de colaboración entre la comunidad y la empresa: La mayoría de directivos desconoce cómo la comunidad puede ayudar a hacer crecer su empresa. No es algo que hayan utilizado nunca en su carrera, ni que hayan estudiado en las escuelas de negocios. El CM les debe mostrar “el camino” y ayudarles a diseñar una estrategia clara de colaboración.



Además de estas responsabilidades, el Community Manager debe tener hagilidad en el manejo de las redes 2.0, gustarle los programas de diseño, audio, video y multimedia, conocer el objetivo de las Comunicaciones Corporativas y la línea de Responsabilidad Social Empresarial de la organización. Todo esto sumado a que debe ser un buen periodista, líder y un ente de confianza para los empleados y miembros de la Gerencia General, a fin de que pueda recibir información de primera mano de la empresa.


Después de ver todas estas competencias, no es descabellado pensar que el nuevo Director de Comunicación será un Community Manager.
Dulce Pérez Colmenárez
Comunicadora Organizacional y Estratégica

miércoles, 22 de septiembre de 2010

¿Por qué el Comunicador Corporativo no debe perder la humildad?




Para algunos periodistas, no es sorprendente ir a ruedas de prensa donde no les ofrecen ni agua para tomar. Para algunos obreros, no es irreal pensar que las personas del área de Comunicaciones, sólo se relacionan con los altos directivos de la empresa. Para algunos profesionales, no es descabellado relacionar a los Comunicadores Corporativos con la imagen de las personas que se encargan de las buenas fiestas y cócteles.


Pero...¿por qué de este error? Obvio que no se debe a una mala percepción por parte de las personas externas a un departamento de Comunicaciones Corporativas, sino porque el profesional de la imagen y las relaciones de una empresa ha perdido el norte de su trabajo.


Es importante recordar que para armar, por ejemplo, una estrategia de Comunicaciones Internas no es suficiente irse por el cómodo boletín o cartelera, sino hablar con los empleados, sindicato, obreros, vigilantes, altos líderes y gerentes de la organización, a fin de saber cuáles son las necesidades comunicacionales reales, analizar los medios que utilizan para dialogar y conocer qué requieren para mejorar sus vínculos con la compañía.


Para realizar este arduo trabajo, es esencial no perder la humildad, con el objetivo de que los empleados se sientan cómodos con el comunicador y que lo perciban como parte del grupo y no como un simple enviado de la Gerencia General, debido a que se corre el riesgo de que las respuestas de los trabajadores sean irreales, lo cual repercutirá negativamente en la estrategia comunicacional.
Por esta razón, además de estudiar y actualizarse en las nuevas herramientas comunicacionales, no se puede perder el norte de las comunicaciones corporativas, el cual no es sólo el público externo, invitar a los medios a entretenidos eventos, sino generar vínculos fuertes entre los empleados con su organización, ya que esta es una de las mejores publicidades que puede tener una corporación con los medios y el público externo.

Dulce Pérez Colmenárez
Comunicadora Organizacional y Estratégica

sábado, 18 de septiembre de 2010

Ahora el reportaje es al estilo 360






Hoy en día, se hace más evidente que la carrera de Comunicación Social se orienta más hacia lo digital y multimedia. Por ejemplo, en el CIAP-Ucab ya se habla de que el diario impreso será un lujo en el futuro; además, se pueden observar en portales de venta de productos tecnológicos los dispositivos para ver diarios digitales, los cuales simulan una hoja de papel pero realizados en fibra óptica para facilitar su manipulación.



El boom de las redes sociales es otra de las características que se suma más al factor de que las personas ya no están leyendo grandes textos como antes, sino que necesitan leer informaciones novedosas en tan sólo unas frases y, con un sólo click, obtener más datos en escritos, fotos o videos de los tópicos que les interesa.



Es en este nuevo ambiente comunicacional que se está gestando una nueva modalidad de hacer periodismo, conocido como reportaje multimedia (su mejor expresión en Latinoamérica se está realizando en El País de Colombia y se denomina Reportaje 360), el cual consiste -con ayuda del audio y video- conocer una noticia desde distintos puntos de vista. Luego de un trabajo de edición y montaje (realizado por un equipo de periodistas, diseñadores, fotógrafos y videógrafos), el material es expuesto en un multimedia que se cuelga en una sección web del diario, a fin de que el usuario pueda ver y escuchar las entrevistas que más les interese.



Para realizar este tipo de reportajes, se necesita que el equipo de trabajo sea multidisciplinario, es decir, que el periodista conozca del lenguaje visual, que el diseñador adapte la imagen al formato información o que el videógrafo realice una edición innovadora sin dejar de pensar en la noticia. Por esta razón, es imperante que el comunicador social no sólo se conforme con realizar talleres de redacción, sino también cursos de fotografía, video y diseño, a fin de que pueda plasmar mucho mejor su trabajo en el mundo digital y hasta coordinar un grupo de trabajo multimedia.



Si deseas conocer cómo es un reportaje 360, no te pierdas este link: El País de Colombia
Dulce Pérez Colmenárez
Comunicadora Organizacional y Estratégica